HISTORIA MILITAR DE ESPAÑA
Campañas




INDEPENDENCIA DE HISPANOAMERICA

BATALLA DE URICA (5 de diciembre de 1814)

Batalla de la Guerra de Independencia venezolana librada en el pueblo de Urica (Edo. Anzoátegui), entre el general en jefe José Félix Ribas (por los republicanos) y el general D. José Tomás Boves (por los realistas) y que, a pesar de la victoria realista, tuvo como desenlace final, la muerte de Boves.

Después de la victoria obtenida en Los Magüeyez el 9 de noviembre de 1814 sobre el coronel José Francisco Bermúdez, el general realista D. José Tomás Boves se dirigió por Nuevo Mundo a Urica a reunirse con su segundo, el coronel Francisco Tomás Morales, quien de Santa Rosa había marchado hacia aquella zona. Por su parte, Bermúdez retornaba a Maturín, donde el general en jefe José Félix Ribas dispuso la ejecución de la ofensiva contra los realistas en Urica; operación que no se había llevado a cabo debido a la decisión de Bermúdez de ir a Los Magüeyez contra Boves.

Para esta empresa contaba Ribas con unos 2.000 hombres, encuadrados en dos batallones de infantería y tres unidades de caballería, a cuyo frente se hallaban José Tadeo Monagas, Pedro Zaraza, Manuel Cedeño, Francisco Parejo y otros. Al llegar al sitio de El Areo, procedió Ribas a la formación de 2 columnas de caballería de 180 hombres, las cuales recibieron el nombre de Rompelíneas, con Monagas y Zaraza de comandantes. Después de efectuar todos los preparativos para la batalla, el destacamento rebelde marchó durante la noche del 4 al 5 de diciembre, para amanecer en Urica frente a los realistas (ya Boves se había incorporado al lugar), desplegados en 3 columnas en una gran sabana.

El ejército realista contaba con dos batallones de infantería y cuatro regimientos, de fuerza variable, de caballería, todos ellos de los Llaneros de Boves.

Las hostilidades fueron iniciadas por Boves, cuando salió con su columna a enfrentarse a la que mandaba el coronel Bermúdez, quien pudo rechazar el ataque. Este éxito inicial de los patriotas permitió a Ribas la colocación de sus hombres en línea de batalla y con ellos cargó contra los realistas, quienes respondieron con intenso fuego de artillería.

En este momento, ordenó Ribas que las columnas Rompelíneas emprendieran el ataque contra la columna derecha enemiga, lo cual fue ejecutado con éxito. Cuando Boves advirtió que su columna había sido envuelta, salió de su centro precipitadamente encabezando una carga de caballería, con tal mala suerte que Boves pereció en el choque de una lanzada. El resto de las fuerzas realistas (centro e izquierda), cargaron contra la línea republicana y la envolvió, y con ello obtuvo la victoria. Las bajas fueron numerosas en ambos bandos.

La muerte del irreemplazable caudillo Boves a la edad de 31 años supuso un duro golpe para la causa realista.





FUENTES: