Tras la desafortunada decisión de unificar los Reales Cuerpos de Ingenieros y Artillería en uno solo y el nombramiento del conde de Aranda como Director General de Artillería e Ingenieros, el conde pensó restablecer la antigua Academia de Matemáticas de Madrid, por lo que el 23 de octubre de 1756 creó en esta ciudad la Real Sociedad de Matemáticas con la misión de formar un curso completo de estudios para "difundir la instrucción en el Ejército con proporción a las diferentes armas", con objeto de formar un curso de Arquitectura, Fortificación y Galería de Modelos.
Su dirección se encomendó al prestigioso ingeniero militar don Pedro de Lucuze con fecha 1 de noviembre de 1756, quien simultaneó este cargo con el de Director de la Real Academia Militar de Matemáticas de Barcelona. Bajo su dirección se pusieron dos artilleros y dos ingenieros quienes, con personal subalterno necesario y la dotación correspondiente, empezaron sus tareas. Al poco tiempo produjeron varios fragmentos de tablas matemáticos, unas tablas de logaritmos, modelos de carruajes de artillería y otros trabajos que se remitieron al Gobierno.
Sin embargo, y a pesar de sus progresos (en dos años llegó a reunir un total de 1278 volúmenes de obras científicas), la naciente sociedad vivió poco. El conde de Aranda fue sustitido por don Maximiliano de la Croix en la Dirección General de Artillería e Ingenieros, quien vió en la Real Sociedad un rival peligroso para el porvenir de ambos Reales Cuerpos facultativos y comenzó a poner obstáculos y dificultades en su funcionamiento. A pesar de los recursos que Lucuze puso en juego para impedirlo, por fin De la Croix consiguió que el Ministro de la Guerra la suprimiera en 1758 por una Real Orden, con el pretexto del poco fruto que producía la Sociedad.
En su defensa, Lucuze escribió un manuscrito de 143 hojas en folio, 80 de ellas de documentos justificativos y aclaratorios, fechado en Madrid el 2 de diciembre de 1758, titulado "EXAMEN DE LA VERDAD: que con el mayor respeto expone al Excmo. Sr. D. Sebastián de Eslaba el Ingeniero Director D. Pedro de Lucuze, encargado de la Dirección de la Sociedad Militar de las Matemáticas, establecida en esta Corte, para sincerarse en el concepto de S.E. de los cargos que se le hacen, y justificar la representación que hizo en 21 de agosto del presente año."
Tras la supresión de la Real Sociedad de Matemáticas, se decretó la separación de los Reales Cuerpos de Artillería e Ingenieros y el ingeniero don Pedro de Lucuze regresó a Barcelona. La unificación de Aranda había fracasado.