HISTORIA MILITAR DE ESPAÑA
Campañas




GUERRA CONTRA LA REPÚBLICA FRANCESA (1793 - 1795)

Batalla de Mas Deu (19 de mayo de 1793)

Victoria del general Ricardos sobre el general Dagobert

Antecedentes en el lado francés
Antecedentes en el lado español
Despliegue defensivo francés
Articulación operativa española
Desarrollo de la batalla
Consideraciones




Antecedentes en el lado francés

Tras la ocupación de San Lorenzo de Cerdá, Arlés y Ceret por los españoles, llegaron a Perpignan constantes noticias acerca del inminente avance de las tropas invasoras sobre la capital del Rosellón. El suicidio del general La Houlière contribuyó a inquietar más aun los ánimos de la población. No obstante, la llegada de cuatro representantes de la Convención consiguió dominar el incipiente pánico, si bien emplearon métodos extremos y expeditivos, castigando con la guillotina la más mínima muestra de debilidad o desacierto.

El 30 de abril, el Comité de Salud Pública decretó desde París la división del mando de los Pirineos en dos sectores militares: la zona occidental, con sede en Bayona y al mando del general Serván para hacer frente a los ataques del general D. Ventura Caro; la zona oriental, con sede en Perpignan y al mando del general De Flers, con la misión de defender el Rosellón del avance del general Ricardos. El general De Flers se incorporó a su puesto en Perpignan el 14 de mayo, con tiempo nada más que para sancionar las medidas adoptadas por la Junta Militar Revolucionaria de Perpignan, tomadas en virtud de un plan presentado la víspera por el general Dagobert.

En efecto, el dia anterior, 13 de mayo, hizo su presentación en la capital del Rosellón otro prestigioso general para ponerse a las órdenes de De Flers, el general Dogobert de Fontenille, experto en guerra de montaña. Ese mismo día propuso un plan que consistía en la ocupación de la comarca montañosa de Los Aspres, situada al noroeste del río Tech. Desde allí podría contrarrestar el sitio al fuerte de Bellegarde y aumentar mucho el valor defensivo a los fuertes de Prats de Molló, Castillo de Baños y Villafranca. Con audaces marchas por rutas de montaña conocidas por este general proponía encadenar las tropas españolas al valle del Tech impidiéndoles su avance, amenazando su retaguardia, impidiendo el empleo de su artillería y caballería por lo quebrado del terreno y, finalmente, obligaría al ejercito español de invasión a regresar a España por serle imposible cualquier avance hacia el llano.

La Junta Militar Revolucionaria de Perpignan no dió crédito a este plan. Tampoco creyó conveniente fortificar las tropas francesas al abrigo de las murallas y baterías de la capital, por lo que adoptó unas medidas que fueron confirmadas al día siguiente por el general De Flers:

  • Tomar posiciones entre los ríos Rear y Cantarrana, en una zona situada a mitad de camino entre los Aspres y Perpignan, justo a la desembocadura del valle del Tech, en una zona denominada "Península del Rear" y a la vista de la ciudad, con la finalidad de cortar el paso al avance español.

  • Establecer fuertes destacamentos de tropas en las localidades de Thuir y Elna, a derecha e izquierda de la Peninsula del Rear, para proteger las comunicaciones de Perpignan con las plazas fortificadas de montaña (Mont Luis y Villafranca) y de la costa (Colliure y Port-Vendrell) respectivamente.

Para llegar a cabo este plan, el general De Flers ordenó al general Dagobert que asegurara la posesión de Thuir mediante el establecimiento de tres campos alrededor de esta población con un contingente inicial de 5.000 infantes, 300 gendarmes a caballo y 15 cañones, con intención de reforzar posteriormente esta fuerza hasta alcanzar los 15.000 hombres.



Antecedentes en el lado español

Una vez concentrado el grueso del ejército y pasada la artillería por el Coll de Portell, el mal tiempo que sobrevino los primeros dias de mayo obligó al general Ricardos a contener su avance. Una vez mejorado el tiempo, el 11 de mayo decidió atacar simultáneamente cuatro lugares inmediatos a Perpignan con la finalidad de reconocer las defensas, tomar prisioneros y estorbar los dispositivos que estuvieran tomando los franceses.

Para ello dedicó una fuerza de unos 7.000 infantes, 1.000 caballos, 4 obuses y 12 cañones de batallón articulados en dos columnas:

Primera Columna: al mando del Teniente General Duque de Osuna, con los Mariscales de Campo D. Pedro de Mendiuneta y el Duque de Montellano, compuesta por las siguientes unidades:

  • 4 batallones del Regimiento de Guardias Españolas
  • 1 batallón de Granaderos Provinciales de Andalucía
  • 1 batallón del Regimiento de Infantería de Mallorca
  • Compañías de Fusileros del 1er. Regimiento de Infantería Ligera de Voluntarios de Cataluña
  • Regimiento de Caballería del Príncipe
  • Regimiento de Caballería del Infante
  • Regimiento de Caballería de Calatrava
  • Regimiento de Dragones de Pavía
  • 4 obuses de a seis
  • 12 cañones de a cuatro

Segunda Columna: al mando del Teniente General D. Juan Curtén, con los Mariscales de Campo D. Rafael Adorno y D. José Crespo, compuesta por las siguientes unidades:

  • 3 batallones del Regimiento de Guardias Valonas
  • 1 batallón de Granaderos Provinciales de Castilla la Nueva
  • 3 compañías de Regimiento de Infantería Ligera de Tarragona
  • Compañía de granaderos del Regimiento de Infantería de Granada
  • Compañía de granaderos del Regimiento de Infantería de Valencia
  • Compañía de granaderos del Regimiento de Infantería de Burgos
  • Regimiento de Dragones de Lusitania

Las dos columnas partieron de Ceret al anochecer del 11 de mayo. Alrededor de esa hora comenzó a llover con tal intensidad que los caminos se llenaron de agua, el rio Tech subió anormalmente de nivel y la crecida se llevó un puente de madera construido en Boulou por los españoles de tal suerte que el paso de las unidades de la columna del Duque de Osuna quedó cortado. En vista de la fuerza de la lluvia y de que no amainaba, el general Ricardos ordenó cancelar la operación y el regreso de las tropas a sus campamentos en Ceret.

El general Ricardos esperó el tiempo estrictamente necesario para que la lluvia cesase y las aguas se retirasen. El 18 de mayo resolvió repetir el ataque de nuevo. Para ello ordenó el levantamiento del campamento de Ceret y su instalación en la localidad de Boulou, a dos horas de Perpignan y más cercano al fuerte de Bellegarde, cuyo sitio había iniciado.



Despliegue defensivo francés

Entre los dias 16 y 17 de mayo el general Dagobert estableció su línea de defensa en el borde sur de la Península del Rear, utilizando el escarpado lecho del rio Rear como foso natural. Desplegó sus fuerzas entre dos posiciones llamadas Mas Deu y Mas Conte. La primera es una meseta a unos 2 kilómetros al oeste de la carretera La Junquera-Perpignan, donde había habido un antiguo convento de Templarios. La segunda es una pequeña elevación situada a unos 1.500 metros al oeste de Mas Deu. Entre la carretera y Mas Deu estaba el Bosque de Caseneuve, utilizado por Dagobert para apoyar el ala izquierda de su despliegue. Al este de la carretera se hallan las Alturas del Rear, una elevación lineal que discurre paralela a la carretera y que Dagobert hizo ocupar para proteger su extremo izquierdo. En ella se alzaba el Castillo del Rear, antigua fortificación donde el general francés colocó cañones para batir el avance por la carretera.

Al oeste de Mas Conte, en la derecha de su línea defensiva, la Península del Rear está cortada longitudinalmente por dos profundos barrancos que cortan la península en dos y que Dagobert mandó enfilar con parte de sus cañones.

La artillería estaba constituida por excelente material y servida por diestros artilleros. En el borde de la meseta quedó emplazada una batería de 14 cañones de a doce y de a cuatro, dominando todas las avenidas que conducían a ella, desde el lugar de Villamulaque, a media legua de Mas Deu, hasta la última batería del ala izquierda.

Este era el dispositivo de defensa francés cuando en la madrugada del 19 de mayo la vanguardia del general Ricardos tropezó con él.



Articulación operativa española

Para la segunda operación de castigo sobre Perpignan el general Ricardos dispuso una fuerza de 12.000 infantes encuadrados en 12 unidades tipo regimiento o batallón, 3.000 jinetes encuadrados en 6 regimientos, 4 obuses y 28 cañones de a 12 y de a 4, articulados en cuatro columnas de la siguiente manera:

Vanguardia: al mando del Mariscal de Campo Duque de Montellano, con el Mariscal de Campo D. José Crespo y formada por las siguientes unidades:

  • 1er. Regimiento de Infantería Ligera de Voluntarios de Cataluña
  • Regimiento de Infantería Ligera de Tarragona
  • 1 batallón del Regimiento de Infantería de Soria
  • 1 batallón del Regimiento de Infantería de Granada
  • Regimiento de Infantería de Mallorca
  • Regimiento de Infantería de Valencia
  • Regimiento de Dragones de Pavía
  • 4 cañones de a doce
  • 4 obuses

Derecha: al mando del Teniente General Duque de Osuna acompañado por el resto de generales de la Casa Real, y formada por unidades mayoritariamente de infantería:

  • Brigada de Carabineros Reales
  • Regimiento de Guardias Españolas
  • Regimiento de Caballería del Infante
  • 6 cañones de a 4

Izquierda: al mando del Teniente General D. Juan Curten, con el Mariscal de Campo D. José Eslava, y formada por unidades mayoritariamente de caballería:

  • Regimiento de Guardias Valonas
  • 1 batallón del Regimiento de Burgos
  • Regimiento de Dragones de Lusitania
  • Regimiento de Dragones de Villaviciosa
  • Regimiento de Caballería del Príncipe
  • Regimiento de Caballería de Calatrava
  • 6 cañones de a cuatro

4ª Columna: al mando del Teniente General D. Garcerán de Villalba, con el Mariscal de Campo D. Rafael Adorno, y formada por las siguientes unidades:

  • 30 compañías de Granaderos Provinciales de Andalucía y Castilla la Nueva
  • Regimiento de Infantería de Hibernia
  • 4 cañones de a ocho
  • 2 cañones de a cuatro

La 4ª Columna debería marchar por el centro del dispositivo de avance, a retaguardia de la vanguardia, juntarse con ésta cuando se detuviera ante la posición enemiga y ambas fuerzas formar el centro del despliegue español. Al mismo tiempo, debía actuar como fuerza de reserva en caso necesario.



Desarrollo de la batalla

A las 16:00 horas del dia 18 de mayo salieron de Ceret las primeras unidades de los regimientos de infantería ligera de Cataluña y Tarragona al mando del coronel D. Juan Miguel de Vives en dirección a Boulou para ocupar las alturas inmediatas y las salidas del pueblo para impedir que los vecinos a los franceses acerca del avance español. El resto de la columna se puso en marcha a continuación de tal manera que a las 02:30 horas del dia 19 la columna de vanguardia estaba frente a Boulou.

A las 18:00 horas el coronel Vives arrestó a dos paisanos procedentes de Perpignan y por ellos se enteró que en Mas Deu, a legua y media, estaban asentados los franceses. A la vista de estos informes, el general Ricardos suspendió la operación en curso y ordenó a sus generales que esperasen nuevas órdenes, que les serían dadas tras el reconocimiento que efectuaría el propio Ricardos con su Cuartel Maestre con dos destacamentos de unos 200 hombres cada uno.

Efectuado el reconocimiento, el general Ricardos observó que el ala derecha del general Dagobert quedaba al aire y era más fácil de envolver que el ala izquierda, apoyado en el Bosque de Caseneuve, y que el centro del dispositivo era muy fuerte debido al barranco del rio Rear que le servía como foso. Por ello el general Dagobert había concentrado su artillería en las dos alas derecha e izquierda. Además, el general Dagobert, temeroso por lo expuesto de su ala derecha, había hecho retroceder las tropas de este ala hacia retaguardia de Mas Conte, renunciando a combatir en el paso del torrente que partía perpendicularmente la Península del Rear.

Por ello, el general Ricardos varió el despliegue y disposiciones iniciales, con intención de envolver el ala derecha del dispositivo francés situado en Mas Conte. Para ello tomó las siguientes medidas:

  • Ordenó al Duque de Osuna que la columna de la derecha formase en línea de batalla con su columna frente a Mas Conte, fijando el ala derecha francesa.
  • Ordenó al Teniente General Curtén que la columna de la izquierda tomase posiciones como para envolver el ala derecha francés.
  • Ordenó al Duque de Montellano y al Teniente General Villalba que se quedasen como cuerpos de reserva.
  • Colocó 14 piezas de artillería frente al barranco del rio Rear que se extendía al pié de la meseta donde se hallaban establecidos los franceses.

A las 05:00 horas de la mañana del dia 19 de mayo las baterías españolas rompieron el fuego. La colocación de la artillería española obligó a Dagobert a concentrar sobre ella la mayor parte de la suya. Bien servida y mejor asentada, los artilleros franceses pronto consiguieron ventaja sobre los fuegos españoles, que en vano trataban de contrarrestar la superioridad del fuego de la artillería francesa.

Tras tres horas de duelo artillero, sobre las 08:00 horas el general Ricardos comprendió que los franceses nunca abandonarían su ventajosa posición, por lo que tomó la decisión de atacar y ocupar la posición de Villamulaque desde tres direcciones. Esta era una pequeña población situada en una colina delante del barranco del rio Rear donde los franceses tenían desplegadas tropas de infantería protegidas por los fuegos de la batería del centro francés. Simultáneamente lanzaría una carga de caballería contra el ala derecha francés.

La articulación operativa de esta acción fue la siguiente:

  • Una columna al mando del Duque de Osuna atacaría Villamulaque avanzando desde el oeste y situándose en el flanco derecho de este lugar. Las tropas asignadas a esta columna fueron:

    - Regimiento de Guardias Españolas, de la columna del Duque de Osuna.
    - Brigada de Carabineros Reales, de la columna del Duque de Osuna.
    - 1er. Regimiento de Infantería Ligera de Cataluña, del cuerpo de reserva.
    - Regimiento de Infantería de Valencia, del cuerpo de reserva.
    - Regimiento de Caballería de Calatrava, de la columna del teniente general Curten.
    - Regimiento de Caballería del Príncipe, de la columna del teniente general Curten.

  • Una columna para apoyar el ataque anterior y que atacaría Villamulaque por otra dirección, formada por:

    - Regimiento de Infantería de Hibernia, del cuerpo de reserva.
    - Regimiento de Infantería de Mallorca, del cuerpo de reserva.
    - Regimiento de Infantería de Burgos, de la columna del teniente general Curten.

  • Una tercera columna para apoyar el esfuerzo principal y que atacaría Villamulaque por otra dirección, formada por las 30 compañías de granaderos provinciales.

  • La columna de caballería se formó con:

    - Regimiento de Caballería del Infante, de la columna del Duque de Osuna.
    - Regimiento de Dragones de Lusitania, de la columna del teniente general Curten.
    - Regimiento de Dragones de Villaviciosa, de la columna del teniente general Curten.

Conducida por el propio general Ricardos, la caballería se lanzó al ataque sobre las dos batería del ala derecha francesa, que avivaron su fuego contra los jinetes españoles. Estos tuvieron que detener su ataque debido a que lo quebrado del terreno impidió maniobrar a la caballería. Se intentó otro ataque por otro sitio, pero la columna de caballería se vió obligada a retirarse por el incesante fuego de metralla que los artilleros franceses dirigieron sobre ella cuando los jinetes descendieron al barranco.

El fracaso de la caballería española pudo suponer un duro golpe para el éxito del general Ricardos. Pero la suerte estuvo de parte española, pues el general Dagobert, creyendo que el ataque principal vendría contra su ala derecha y por no poseer reserva alguna, sacó tropas de su ala izquierda para reforzar la derecha. Entretanto, el ataque del Duque de Osuna tuvo éxito, pues los franceses que guarnecían Villamoluque se retiraron sin ofrecer resistencia alguna. El Duque de Osuna prosiguió su avance. Los fusileros del Regimiento de Cataluña marchaban de nuevo en vanguardia subiendo por la colina hacia la meseta de Mas Deu para tomar la batería asentada junto al castillo.

Llegaron a la meseta 25 soldados del Regimiento de Cataluña con el Coronel Vives al frente; 10 carabineros reales al mando del segundo jefe de la brigada, D. Antonio Córdoba y Heredia, y los capitanes D. Antonio Calatayud y D. José Iturriaga; y 7 soldados del Regimiento del Infante con su coronel D. Manual Tovar. Los franceses abandonaron la formación dejando los cañones en sus posiciones. La resistencia francesa del ala izquierda se quebró, y las tropas que guarnecían la línea iniciaron la huida hacia el Bosque de Caseneuve en dirección al Castillo del Rear. Los dragones de los regimientos de Pavía y Villaviciosa iniciaron la persecución, pero fueron detenidos por la artillería del Castillo del Rear.

A pesar del desmoronamiento de su ala izquierda, el general Dagobert decidió resistir en el ala derecha, cosa que hizo hasta que se le acabó su munición. En ese momento se dió la orden de avance general a la línea española. Los franceses iniciaron la huida, siendo perseguidos por la caballería española. El general Dagobert organizó un cuerpo de 300 gendarmes a caballo para proteger la retirada, pero los gendarmes huyeron arrollando a su propia infantería en retirada dejando solo al general al ver su caballo herido. El general Dagobert fue cogido prisionero, pero escapó con gran sangre fría haciéndose pasar por su Ayudante de Campo.

Con las tropas que aún quedaban en la línea, el indomable general Dagobert inició la retirada forman el cuadro para evitar los ataques de la caballería española.

Cinco horas duró la batalla desde los primeros cañonazos. Sobre las 11:00 horas el general Ricardos entró en el campo francés de Mas Deu, siendo recibido por la tropa española con "¡Vivas al Rey!" y "¡Vivas al general!".



Consideraciones

El general Dagobert cometió un error: no contar con ningun cuerpo de reserva con el poder hacer frente a situaciones inesperadas. Por ello tuvo que sacar fuerzas del ala izquierda para reforzar el ala derecha. ¿Que hubiera pasado si, fracasado el ataque de caballería española sobre el ala derecha, el ala izquierda hubiera aguantado el ataque de la columna del Duque de Osuna?

Por su parte, el general Ricardos cometió otro grave error: lanzar la caballería al ataque contra una posición dominada por los fuegos de artillería. Esta acción pudo haberle costado la derrota en el día, pues por dos veces fracasó el ataque. Por otra parte, es de justicia reconocer que la artillería francesa estuvo mejor asentada y servida que la española, de forma que ésta no pudo acabar con los fuegos de los franceses ni quebrar las líneas francesas.

Los franceses dejaron 50 muertos en el campo de batalla, si bien tuvieron 100 más y unos 250 heridos. Los españoles sufrieron 34 muertos y heridos. Sobre las 13:00 horas el general Ricardos dispuso el regreso de las tropas españolas al campo de Boulou, desde donde habían partido por la mañana.

El general Ricardos no pudo explotar materialmente su victoria, pues no disponía de tropas ni transportes suficientes para acampar en Mas Deu ni para seguir avanzando hacia Perpignan. Por el contrario, antes debía tomar las plazas fuertes que tenía a retaguardia, en la frontera. No obstante, el valor de la victoria fue el reconocimiento y ascendiente del ejército español sobre el francés y el pánico que se produjo en Perpignan, que se creyó a punto de caer en manos españolas.

Como muestra de la situación de pánico creada daremos dos ejemplos: el 4º Batallón del Regimiento del Gard formado por 800 hombres se insubordinó por terror y se negó a obedecer por tres veces la orden del general De Flers de salir a proteger la ciudad en el campo de Mas Ros. Otro ejemplo: las tropas francesas afluían por todas partes a refugiarse en Perpignan. En su huida contagiaron el pánico a los 1.200 soldados que el general De Flers ordenó sacar de la ciudad y desplegar en el campo de Serrat-d´en-Vaqué para acoger a los huidos. Sobre las 21:00 horas, mientras seguían entrando tropas en la ciudad, se propagó el rumor de que llegaban los españoles. Se cerraron las puertas de la ciudad y se comenzaron a disparar los cañones de las murallas contra los soldados franceses que pretendían acogerse a ella, creyendo que eran españoles. La confusión duró hora y media y costó a los franceses 20 muertos y 64 heridos.

Tras la batalla de Mas Deu, el general Ricardos se dedicó a asegurar su flanco derecho y su retaguardia con la ocupación de las localidades cercanas a la costa de Argeles, Elna y Cornella y la toma de los fuertes de Prats de Molló, Castillo de Baños y Bellegarde, mientras que el general De Flers se dedicaría a organizar el campo atrincherado de La Unión, que salvó a la ciudad en la batalla de Perpignan del 17 de julio.

Los historiadores franceses reprochan al general Ricardos no haber aprovechado audazmente el desconcierto y pánico francés tras la batalla de Mas Deu y haber ordenado un ataque contra Perpignan, en lugar de haberse dedicado a asegurar prudentemente su retaguardia y flanco derecho. En su opinión este error de Ricardos le costó desaprovechar una muy buena ocasión para tomar la capital del Rosellón.





FUENTES: