HISTORIA MILITAR DE ESPAÑA
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LEVANTAMIENTO BEREBER DE IFRIQIYA (740 - 742)

Sobre 734 ó 737, el califa Hixam nombró gobernador de Egipto a Ubayd Allah ibn al-Habhab ibn al-Harit con poderes sobre Ifriqiya y Al-Andalus. Este, a su vez, nombró como gobernador de Al-Andalus a Uqba ibn al-Hachchach, porque el padre de éste, que había sido gobernador de Irak en el periodo 675-714, había manumitido al abuelo de aquel y, por tanto, era su patrono.

El nuevo gobernador de Egipto dió órdenes de cobrar a la población bereber los impuestos de los infieles. Este hecho, unido al amor de los bereberes por la independencia, su marcada exaltación religiosa y el recuerdo de sus triunfos sobre los árabes en los primeros momentos de su conquista, hizo que un tal Masayra se levantara en la región de Tanger alrededor del año 740.

El componente religioso de la revuelta bereber fue la adopción del "jarichismo", cuyo origen es el siguiente: tras la revuelta del Camello en la que Alí, yerno del Profeta, se enfrentó a Talha, Zubayr y Aixa, la viuda de Mahoma, el gobernador de Siria y fundador de la dinastía Omeya, Muawiya, se alzó contra Alí acusándole de la muerte del califa Uthman. Se enfrentaron en la batalla de Siffin, interrumpida para llegar al arbitraje que destituyó a Alí. Los "jarichíes", término que significa "los que se salen de la comunidad", son los que se niegan a reconocer el citado arbitraje.

Los rebeldes nombraron a Abd Allah ibn Hudaych, ex-liberto bizantino de Muza ibn Nusayr, como gobernador de Tanger. El gobernador de Egipto, Ubayd Allah, pidió a Uqba, gobernador de Al-Andalus, que reconquiste la ciudad de Tanger, pero Uqba fracasó en su intento.

Otro ejército árabe de socorro al mando de Habid ibn Abi Ubayd, el asesino de Abd al-Aziz ibn Muza, no pudo avanzar más allá del oeste de Tremecén, en la actual costa argelina

La rebelión bereber se extendió. Masayra se proclamó califa, pero acabó muerto por sus seguidores. Estos eligieron como nuevo jefe a un tal Jalid ibn Hamid al-Zanati, que volvió a derrotar a los árabes en la batalla "de los nobles", en el valle del Chélif.

Ante la magnitud del desastre, el califa Hixam destituyó de su cargo a Ubayd Allah ibn Habhab y envió como nuevo gobernador a Kultum ibn Iyad con un poderoso ejército árabe de 30.000 soldados. La vanguardia estaba formada por unos 7.000 soldados de los "chunds" sirios, al mando Balch ibn Bishr al-Qushayrí, sobrino de Kultum.

El ejército árabe, falto de disciplina y mal mandado por Kultum, que despreciaba a los bereberes, fue derrotado en una batalla daba en las cercanías de Tánger, a orillas del río Sebu, en octubre-noviembre de 741. En la batalla murieron Kultum y el veterano africano Habid ibn Abi Ubayd. Se especula con que también muriese el gobernador Uqba, con lo que fue elegido interinamente por segunda vez Abd al-Malik ibn Qatán. El sirio Balch se refugió con los soldados de su vanguardia en Ceuta, donde fue rápidamente sitiado por los rebeldes, viéndose obligado a pedir ayuda al nuevo gobernador de Al-Andalus.

Los bereberes amenazaron también la ciudad de Qayrawan, pero los árabes de la ciudad consiguieron derrotar a sus desorganizados enemigos a causa de la rivalidad de los líderes de éstos, y conservaron la ciudad hasta 742. En esa fecha llegó el nuevo gobernador de Egipto, Hanzala ibn Safwan, que aplastó definitivamene la rebelión y nombró a Abu-l-Jattar como gobernador de Al-Andalus, acabando con el estado de caos en la península.

En 743 murió el califa Hixam y le sucedió su sobrino Walid II.



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